Los martes con poesía

                      Fernando Villalón  

Recuerdo

A José Bergamín

Del siempre amanecer por las mañanas

hastiada nave del capricho a remos,

una rama de oliva en la su prora

su quilla enfila el olvidado afecto.

-Luminarias de fe sobre el trinquete,

velamen de ilusión que aúpa el viento-.

Tu recuerdo con alas de vilano

-rapaz del alma y del letal sosiego-

riza el aire que aspiro en espirales

de blancas brumas y de gris anhelo;

perdido en la espesura de las horas

-rosales del jardín de mis recuerdos-.

Al timón de tu memoria, timonera

de la nave perdida de tu cuerpo;

sin brújula, al pairo ante la Esfinge, 

¿qué le preguntas a mis ojos muertos?

Ni agua cala la ría de mi alma, 

ni sitio para ti quedó en mi puerto.

 

Romances del 800

 

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